Mariachis en Catalunya
Mariachis en Catalunya para eventos
La alegría del mariachi hoy por hoy se puede disfrutar en cualquier ciudad del mundo, gracias a su evolución y a esa tradición que se ha pasado de generación en generación como lo dice el siguiente artículo.
A continuación, pondré algunos lugares donde el mariachi tequila ha llevado su música, o algunos lugares donde nos podemos desplazar.
- Barcelona
- Tarragona
- Girona
- Lleida
- Hospitalet de Llobregat
- Badalona
- Terrassa
- Mataró
- Reus
- Sant cugat de Llobregat
- Sant Boi
- Manresa
- Rubi
- Vilanova i la Geltrú
- Viladecans
- El Prat de Llobregat
- Castelldefels
- Granollers
- Cerdanyola del Vallès
- Mollet del Vallès
- Esplugues de Llobregat
- Gavà
- Figueres
- Sant Feliu de Llobregat
- Vic
- Lloret de Mar
- Blanes
- Igualada
- Vilafranca del Penedès
- Ripollet
- El Vendrell
- Tortosa
- Montcada i Reixac
- Sant Adrià de Besós
- Olot
- Cambrils
- Sant Joan Despí
- Barberà del Vallès
- Salt
- Sant Pere de Ribes
- Sitges
- Premià de Mar
- Sant Vicenç dels Horts
- Martorell
- Sant Andreu de la Barca
- Salou
- Pineda de Mar
- Santa Perpètua de Mogoda
- Valls
- Molins de Rei
- Calafell
- Olesa de Montserrat
- Castellar del Vallès
- Palafrugell
El Mariachi
A mediados de la década de 1920, el mariachi entró en la vida social y cultural urbana de
Ciudad de México. Al entrar en nuevos contextos de desempeño, el mariachi se hizo eco de su pasado rural
y se convirtió en un emblema de la región occidental de México.
El Mariachi fue absorbido en la vida social urbana y participaba en las industrias del grabación, la radio y los
Procesos de producción cultural. Como un conjunto y un repertorio, el mariachi fue
Transformado por procesos de medios y estandarizados a través de la circulación y distribución
De productos culturales en México, España, América Latina y el suroeste de los EE.UU.
La autenticidad en el desempeño se ha mantenido a través de vínculos con el pasado
producido por las industrias de los medios de comunicación. Además, el esfuerzo de los profesionales para
mantener la tradición del mariachi como arte y práctica y así pasar de una generación a la
siguiente ha sido de gran importancia en la expansión del mariachi hacia las instituciones educativas y
salas de conciertos, especialmente en los Estados Unidos.
El proceso de vincular el pasado con el presente, y la forma personal en la que se transmite, ha consolidado la posición del
Mariachi como una forma cultural valorada.
El mariachi moderno como se muestra en las películas de finales de los años 1930 y principios de los 40, tenía
poco parecido a las versiones rurales en términos de vestimenta, repertorio y ejecución musical.
El charro, la región de Los Altos, la cultura del rancho y el mariachi eran elementos centrales en la construcción de una identidad posrevolucionaria que valorizó la cultura mestiza
y como resultado de estas convergencias, el charro cantor y el mariachi emergieron como
representativas de Jalisco y la región occidental. Estas imágenes y sonidos fueron
formados por trayectorias políticas, económicas y culturales que se cruzaban dentro de la imagen, la voz del canto charro y el sonido del mariachi comprimidos en una
Representación de la mexicanidad.
La tradición mariachi
Las películas de finales de los años treinta pudieron haber sido una respuesta conservadora a las políticas.
El clima político estaba cambiando, no sólo dentro de México, sino también en América en
general, a través de las influencias y efectos de la Segunda Guerra Mundial. Los argumentos de la
comedia ranchera resonó con una forma de ideología conservadora que se identificaba con la
percepción de «Occidente» como se hace referencia en las películas de vaqueros estadounidenses y las características de
machismo.
El charro se convirtió en una figura heroica y personaje cantante que se infundió con
romanticismo. La combinación de estos elementos elevó el valor icónico del charro
dentro de la cultura popular, así como la del mariachi.